De acuerdo con la doctora se requiere de un manejo multidisciplinario de los pacientes. Para esto instó a las autoridades del Ministerio de Salud a dotar los hospitales de unidades cardio- oncológicas y promover que las clínicas privadas también dispongan de este espacio como pasa en otros países.

A propósito de iniciar la primera Jornada Cardio-Oncológica y Prevención Cardiometabólica de la sociedad en el hotel Sheraton, la doctora explicó que no existen datos a nivel nacional que den una dimensión a la problemática y por eso la entidad iniciará un registro de cardiotoxicidad para manejar esos datos.

“El registro de cardio-oncología que iniciaremos el próximo mes permitirá conocer la magnitud del impacto de los tratamientos oncológicos en la cardiología y tomar acciones para mejorar la vida de los pacientes”, explicó la doctora Almonte.

Agregó que hasta diez años después de haber tomado el tratamiento oncológico el paciente puede presentar una cardiopatía derivada de este.

La jornada cuenta con participación de cardiólogos nacionales e internacionales, entre ellos el doctor José Zamorano, del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, quien explicó que la dosis y duración del tratamiento oncológico pueden verse influidos por cómo reacciona el corazón.

Destacó que cada vez es más necesario hacer todas las evaluaciones cardiológicas antes y durante el tratamiento oncológico.
También recomendó a los pacientes sobrevivientes hacerle las evaluaciones de lugar, pues las secuelas pueden aparecer años después.

Por: María Santana.