Rabia Humana, Control epidemiológico
Por doctora Yessi Alcántara, Médico Pasante.
La Rabia Humana es una enfermedad viral que tiene la capacidad de infectar a las células del tejido nervioso del cuerpo humano a través de la saliva de algún animal infectado por el virus. Se transmite por mordeduras, lameduras y arañazos de animales como perros, gatos, huron y murciélagos, causando inflamación del cerebro y de la médula espinal de manera aguda, progresiva y mortal.
En la República Dominicana la rabia humana es una enfermedad bajo vigilancia epidemiológica y control desde 1961. Las estrategias del programa diseñado para prevención y control de la enfermedad incluyen: 1) vigilancia epidemiológica de los casos humanos reportados como mordeduras y arañazos por animales considerados como reservorio del virus, especialmente perros y gatos. 2) vacunación a nivel nacional de las especies animales que transmiten la enfermedad. 3) información a la población general y personal de salud sobre la enfermedad (prevención y modo de transmisión). 4)comunicación entre los diferentes niveles de atención al usuario, con el departamento epidemiológico encargado de la atención a casos reportados; y 5) investigación de posibles alertas epidemiológicas en zonas donde se detectan casos reciente de la enfermedad.
Si la persona se ve expuesta al virus debe de lavarse inmediatamente la zona afectada con abundante agua (preferiblemente a chorro), jabón y solución de yodo y luego dirigirse al centro de salud más cercano para iniciar profilaxis.
El riesgo epidemiológico de la rabia lo va a determinar el carácter de la agresión en la piel del humano. Las mordeduras son consideradas como heridas de alto riesgo, mientras que las exposiciones como contacto indirecto con un animal rábico, actividades cotidianas como acariciar, alimentar o manipular animales reservorios son consideradas exposiciones de bajo riesgo epidemiológico, al igual que el contacto con sangre, orina, heces y saliva con la piel intacta.
Importante, los animales que se encuentran vivos y saludables 15 días después de la agresión no tienen el virus, de lo contrario; si el animal luce agresivo, con un comportamiento fuera de lo normal o con sobre producción de saliva, debe se der inmediatamente notificado a la autoridad correspondiente para ser sacrificado y realizar el diagnóstico por estudios de laboratorio.
Como médicos en formación debemos de entender que cada caso es particular y único, motivo por el cual se le debe de realizar un examen físico riguroso a cada paciente y analizar de manera correcta el tipo de exposición de la herida para poder tratar al paciente de manera correcta según el tipo de riesgo de su agresión.