Autor: Lorgis Geoeiddy De La Rosa German. Estudiante de Medicina de 4to año de la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU). Oficial Local del Comité Permanente de Intercambio Profesional (SCOPE). Organización Dominicana de Estudiantes de Medicina (ODEM).
“Todo lo que se ignora, se desprecia”. -Antonio Machado

Actualmente en el país se debate el tema de una orden departamental del Ministerio de Educación 33-2019 sobre política de género en el sector educativo preuniversitario, dejando al descubierto el caos, la ignorancia y la distorsión de información que se tiene sobre él principalmente en los padres y religiosos.

Desde tiempos muy remotos el tema de educación sexual, orientación sexual o cualquier otro que se asemeje a estos, han sido motivo de repulsión, vergüenza, rechazo y un sin números de palabras que aun en pleno siglo XXI como se dice en las calles, no ha cambiado mucho, para no decir nada. A pesar de los avances como sociedad, este tema lo han forzado para que no se tenga total plenitud de expresión o educación y quede atrás, privando a los adolescentes y a la población en general con ideas erróneas y con poca posibilidad de poder obtener respuestas seguras y responsables cuando surgen dudas sobre sexo, género y/o sexualidad.

La organización mundial de la salud (OMS) dice que género se refiere a los conceptos sociales de las funciones, comportamientos, actividades y atributos que cada sociedad considera apropiados para los hombres y las mujeres (1). Esto hace alusión a que el género te sitúa dentro del grupo de hombres o mujeres según el sexo, esperando que tu conducta honre los roles establecidos para cada género respectivamente.

Libertad para que al fin estos temas sean tratados en nuestras escuelas y se tengan ideas concisas de quien soy, que quiero, equidad de género y respeto. O más bien, que será una condena, ya que da libre albedrío para que los adolescentes y jóvenes hagan lo que deseen o se les deje elegir y eventualmente estos cambien su orientación sexual o vean esto normal.

Son algunas de los ideales encontrados con esta propuesta, y donde lamentablemente predomina en las personas los pensamientos que esta decisión nos llevaran a condena.

El tema de educación sexual o identidad de género no solo debe llevarse a los adolescentes sino a la población en general; ¿Que te hace pensar que por que enseñen o aclaren dudas de orientaciones sexuales u homosexualidad llevara tu hijo hacerlo? ¿Acaso no hay personas homosexuales provenientes de matrimonios heterosexuales y estables? ¿Porque hacemos tendencia como sociedad de satanizar estas iniciativas?, porque no tener la certeza de que estas acciones afirmaran la identidad sexual de cada joven? ¿No es más importante abrazar la idea de que cada persona después de estos talleres, clases o charlas obtendrá una confianza plena consigo mismo?

Que nos hablen de sexo, género o sexualidad no nos desviara de nuestro género, no ocasionara que tengamos sexo sin control, al contrario, contaremos con la información adecuada para tomar buenas decisiones, decisiones responsables, acciones que nos guíen a una mejor sociedad. Porque mejor no oponerse a una sociedad que profane el irrespeto, el rechazo, las burlas, las heridas psicológicas y físicas a aquellos individuos que deciden ser diferentes o tener orientación distinta.

Estas reacciones nos dejan mal parados como sociedad, solo enfocamos negatividad en proyectos que podrían ser positivos y de gran aporte. Nadie ha dicho que a lo mejor pueda tratarse de un diseño de educación que promueva la equidad de género, la integridad como persona, donde nuestro niños, adolescentes y jóvenes aprendan que como hombres y mujeres tenemos los mismos derechos, y que ninguna persona, independientemente del género tiene potestad sobre otra.

¿Y si este es el inicio de edificar nuestros niños desde edad temprana a respetar al sexo opuesto, y por ejemplo disminuya la violencia de género, la violencia en las calles en un futuro? A disminuir los abusos infantiles, porque tienen ideas claras de su integridad. ¿Y si por luchas o adversidades absurdas sin fundamentos y conocimiento del tema destruimos la esperanza y la materialización de un avance para nuestra sociedad? ¡Tenemos mucho en que pensar y saber si hacemos el cometario o lucha correcta!

Referencia:

Organización Mundial de la Salud. Género. 2019. Disponible en: https://www.who.int/topics/gender/es/